Mencione un poquito sobre este
maravilloso día en la entrada anterior; por la tarde del viernes 2 de octubre
salimos de Puebla para México, iba con toda la emoción del mundo ya que era la
primera vez que asistíamos a un evento así. Fue un día un poco accidentado por
dos cosas que me sucedieron: la primera fue que el jueves por la noche estaba
muy roja de la cara (especialmente de la zona “T”), el viernes por la mañana ya
no se me notaba tanto pero si me tocaba la nariz me dolía además de que sentía
un poco de comezón. El evento fue en el Hotel NH del aeropuerto internacional
de la Ciudad de México (terminal 2), antes de ir a registrarnos al hotel
comencé a sentirme rara, sudaba frio y tuve mareo después empezaron las náuseas
(el desayuno me callo pésimo) que iban en aumento y fue el momento en que
decidimos ir al hotel, al subir al elevador se me “alborotaron” más las náuseas
pero no estaba dispuesta a ir por las escaleras iba muy cansada, apenas me dio
tiempo de llegar a la habitación pero volver el estómago me dio mucho alivio,
nos hablaron para bajar a cenar ya había algunos pacientes, mi mama bajo y a mí
me hubiera encantado pero aun sentía malestar. Pase una noche tranquila y
desperté muy temprano en cuanto abrí los ojos me volvieron las náuseas, por un
momento pensé que no podría bajar al salón donde sería la reunión, de nuevo
volví el estómago aun así me bañe y arregle esperando que el malestar pasara,
no podía creer que me estuviera pasando justo ese día que lo había esperado
tanto desde el momento en que me invitaron además mi nariz me seguía doliendo.
Bajamos a recepción minutos antes
de las 10 am, ya había varias familias aunque yo no conocía a nadie solo a una
señora que conocí días antes por Facebook, su hija se llama Fernanda tiene 12
años y venían al evento desde Baja California. El malestar no me dejaba, a la
primera persona que saludamos fue a Laura, de la agencia de viajes ella sabía
que me sentía mal porque hablo con mi mama la noche anterior, le dije que
seguía mal y me consiguió una pastilla y un té, inmediatamente saludamos a
Iliana (encargada de call center en Proyecto Pide un Deseo México) que ya
teníamos el placer de conocer en persona, inmediatamente se acercó Alejandra
(gerente de atención a derechohabientes) que no tenia el gusto de conocer en persona; todos preguntaban cómo me sentía y me sentía mal por alarmarlas de mas
pero confiaba en que con la pastilla pronto se me pasaría. Minutos antes de que
iniciara el evento se acercó una señora y me saludo como si me conociera, me
tomo por sorpresa porque no tenía idea de quien era; una señora alegre,
sonriente con una niña muy bonita, con mucho ángel y con una sonrisa como la de
su mama (Katty y Keila) hablamos unos minutos y no deje que se notara que no sabía quién era hice
memoria: ¿la conozco por Facebook? no, si fuera así la recordaría, tarde en
recordar pero por fin lo supe!! y en efecto si la conocía, por correo
electrónico pero la conocía; aproximadamente
hace 2 o 3 años una mama MPS II (creo) de Puerto Vallarta, Jalisco me comento
que había conocido a una mama MPS IV y que le había hablado de mí, que si le
podía dar mi teléfono para que habláramos y así fue me hablo y después
estuvimos en contacto vía correo electrónico pero hacía más de un año que no
sabía nada de ellas, además de que nunca la vi ni en foto (a la niña sí) si la
hubiera visto la habría reconocido de inmediato. Ya seguiré contando en la
próxima entrada…
Keila y yo |
Con nuestras mamas |
No hay comentarios:
Publicar un comentario